Eco-logias

Nuevo libro “ECO-LOGIAS”  (2025) de Sergio Quiroga viene con prologo de Ajay Kumar Srivastava Profesor Asociado Decano de la Facultad de Ciencias y Jefe del Departamento de Botánica, St Xavier’s College, Ranchi, India. En las aulas secundarias la educación ecológica convertido en un pilar fundamental para la formación de la nueva generación. Su importancia trasciende la mera conciencia ambiental; es una respuesta urgente y estratégica a los desafíos concretosy una herramienta para construir un porvenir sostenible. A nivel nacional, la Ley de Educación Ambiental Integral (27.621) establece este saber como un derecho, exigiendo su implementación transversal en todas las escuelas. Sin embargo, en San Luis, esta norma cobra una dimensión profundamente local. La provincia, pionera en políticas verdes con su ley "Cero Papel" y su apuesta a las energías renovables, encuentra en las aulas el semillero para dar continuidad a su modelo de desarrollo.

Prologo

Cuando llega una ola orquestada, se siente en todas partes. El clamor de las "Voces Verdes" es claramente perceptible aquí en Ranchi, India, a 16.290 km de distancia. Este proyecto, creado, adaptado y dirigido por entusiastas estudiantes de medio ambiente, se ha adentrado en un área omnipresente de la sociedad que hoy en día no es muy apreciada. En una época en la que no estamos seguros de los beneficios que nos brinda la naturaleza y en la que no sabemos cómo será nuestro mundo dentro de 200 años, el tema del proyecto es una obra idónea, preparada para mejorar nuestro camino hacia un futuro mejor.

Si bien se invierten miles de millones en investigación ambiental en todo el mundo, muchas de estas investigaciones, sin duda, generan inquietudes, pero debido a la falta de concienciación pública y comunicación adecuada, no se logran resultados óptimos. Este proyecto, liderado por Sergio Quiroga y un cuerpo prestigioso de profesores de la EPA 10 Maestro Escultor Vicente Lucero de Villa Mercedes como Daniela Gabutti, Romina Olaviaga y Osvaldo de la Canal y seguido por estudiantes igualmente entusiastas, ha intentado concienzudamente acortar la distancia entre los esfuerzos realizados hasta la fecha y los resultados.

Curiosamente, el equipo de trabajo ha adoptado un enfoque multifacético que abarca diversos campos de la ciencia, las artes y la comunicación, lo cual resulta lógico. Para empezar, el proyecto desarrolló una sólida comprensión de los problemas ambientales, un sólido plan de ejecución y, finalmente, avanzaron con precisión clínica. Se percibió claramente que el verdadero problema residía en el nivel de concienciación. El equipo recorrió la localidad mediante su trabajo de investigación y obtuvo datos significativos. Sin datos concisos, cualquier plan de desarrollo resulta ser un ejercicio poco óptimo. Después de todo, para cruzar un desagüe de un metro y medio de ancho, hay que saltar más de cinco, o se acabará en un baño de lodo. En 2016, nuestro equipo realizó un trabajo similar en Ranchi, India, lo que marcó una diferencia significativa en la opinión de las autoridades municipales sobre la ejecución de los programas de saneamiento.

Lo mejor de esta experiencia es que el equipo está compuesto principalmente por jóvenes que serán los líderes del mañana. Por lo tanto, podemos estar seguros de que los esfuerzos de Sergio y su equipo seguirán marcando la diferencia durante al menos siete generaciones. Cuando se trata de la salud de la Madre Tierra, La Ribera y Ranchi deben recorrer un pequeño camino juntos para dar el toque sanador. Gracias.

Ajay Kumar Srivastava

Profesor Asociado Decano de la Facultad de Ciencias y Jefe del Departamento de Botánica, St Xavier’s College, Ranchi, India.

La severa sequía, la desertificación y el estrés hídrico crónico son realidades que ningún joven sanluiseño puede ignorar. Educar en el uso racional y eficiente del agua no es un tema teórico; es una lección de supervivencia y adaptación. Conocer la fragilidad de los suelos y la importancia de las cuencas hídricas pasa de ser un contenido curricular a un conocimiento vital. Al estudiar y valorar el ecosistema serrano, el bosque de caldén, la majestuosidad de la Sierra de las Quijadas o la biodiversidad del Valle de Conlara, los estudiantes fortalecen su sentido de pertenencia. Aprenden que el patrimonio natural no es un paisaje postal, sino un capital frágil que sustenta el turismo, la agricultura y la calidad de vida de todos