Andrés Edgardo Vázquez es el nuevo titular de la Dirección General Impositiva (DGI)

El presidente Javier Milei designó al frente de la nueva Dirección General de Impositiva (DGI) a Andrés Edgardo Vázquez, un funcionario que tiene sensibles polémicas por su actuación en la entidad tributaria durante los años del kirchnerismo. 

Andrés Edgardo Vázquez es un funcionario de larga trayectoria asociado con la administración kirchnerista, conocido por su trabajo dentro de la agencia tributaria del país, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP). Vázquez ganó atención pública en 2009 durante el conflicto entre el gobierno de Kirchner y el grupo de medios Clarín. Lideró una controvertida operación que involucró a 200 inspectores fiscales que allanaron las oficinas de Clarín, que fue ampliamente criticada como una táctica de intimidación. Esta operación condujo a un caso legal y repercusiones políticas. Reemplaza a Gabriel Ramírez en este puesto. Vázquez tiene una amplia formación académica, con títulos en Administración y Contador Público de la Universidad Argentina de la Empresa (UADE). A lo largo de su carrera, se ha especializado en control financiero y medidas contra el lavado de dinero.

En el ámbito internacional, Vázquez ha asistido a múltiples sesiones de capacitación en los EE. UU., incluido un seminario sobre lavado de dinero en el Departamento del Tesoro de los EE. UU. en 1997, así como cursos sobre interdicción aeroportuaria e investigaciones de precursores químicos organizados por el Departamento de Justicia y la DEA en 1999. Sus sólidas credenciales académicas y su experiencia práctica en la supervisión fiscal lo convierten en una figura significativa en la administración fiscal de Argentina.

Durante su carrera, Vázquez ocupó puestos clave en la AFIP, incluido el de jefe de la Dirección Regional Sur, y ha estado vinculado a operaciones de inteligencia dentro de la organización. Sus estrechas conexiones con la administración Kirchner y su participación en funciones sensibles de inteligencia fiscal lo han convertido en una figura influyente. Recientemente, se ha especulado sobre su posible regreso a un papel importante dentro de la AFIP, posiblemente a cargo de las divisiones de Inteligencia y Grandes Contribuyentes, áreas que manejan información políticamente sensible.

Vinculado a la SIDE, lideró un megaoperativo de la AFIP contra el Grupo Clarín en 2009, tuvo bajo su órbita la vigilancia de actividades de Cristóbal López y Lázaro Báez y quedó en la mira judicial cuando se descubrió que controlaba dos cuentas no declaradas en el exterior con casi medio millón de dólares, según reconstruyó el Diario La Nacion.