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Durante una entrevista televisiva, la vicepresidenta Victoria Villarruel expresó discrepancias con el presidente Javier Milei en varios aspectos, incluyendo la nominación de jueces para la Corte Suprema, la intervención militar en Rosario y los aumentos salariales para senadores y diputados. Villarruel reveló que se enteró por los medios de comunicación sobre los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla para la Corte Suprema, mostrando cierto rechazo hacia la propuesta, especialmente en el caso de Lijo, debido a su actuación en una causa previa.
En relación con la intervención militar en Rosario propuesta por la ministra Patricia Bullrich para combatir la violencia narco, Villarruel se opuso firmemente, argumentando que los militares no deberían combatir civiles y recordando los problemas que surgieron de tales intervenciones en la década de 1970. Además, defendió el aumento salarial para senadores y diputados, argumentando que los legisladores deben recibir una compensación adecuada por la función vital que desempeñan, aunque esta medida fue revocada posteriormente por solicitud de Milei.
Villarruel también criticó al diputado José Luis Espert por llamar a una "rebelión fiscal", argumentando que esta idea no resuena con la población que lucha por pagar impuestos debido a la falta de recursos. Sin embargo, señaló que como funcionaria pública, esta posición es inapropiada.
En cuanto al debate sobre el mega DNU en el Senado, Villarruel defendió su decisión de permitir su tratamiento, afirmando que se trata de garantizar la institucionalidad y el funcionamiento del poder legislativo. Aunque reconoció las diferencias con Milei, afirmó que su relación es buena y que ambos se complementan, con estilos diferentes tanto en la vida pública como en la privada.