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El Pacto para el Futuro, adoptado en el año 2024 por los líderes mundiales, representa un esfuerzo innovador para transformar la gobernanza global y adaptar la cooperación internacional a las realidades modernas y los desafíos futuros. Este acuerdo histórico es el resultado de un proceso inclusivo de varios años y tiene como objetivo abordar cuestiones que han estado sin resolver durante mucho tiempo, asegurando que las instituciones internacionales puedan satisfacer las demandas del mundo actual, que cambia rápidamente. El Pacto abarca varias áreas cruciales, entre ellas la paz y la seguridad, el desarrollo sostenible, el cambio climático, la cooperación digital, los derechos humanos y la igualdad de género, y sienta las bases para un sistema internacional más representativo y eficaz.
El Pacto para el Futuro es un acuerdo multilateral que responde de manera integral a los principales desafíos globales. Propone 56 acciones concretas distribuidas en cinco grandes ejes, que abarcan desde la promoción de la paz y la seguridad internacional hasta la lucha contra el cambio climático, la protección de los derechos humanos y el manejo de las amenazas emergentes, como la inteligencia artificial.
Cinco Ejes Prioritarios del Pacto para el Futuro
Desarrollo Sostenible y Financiación del Desarrollo El desarrollo sostenible es uno de los pilares centrales del pacto. Reconoce que el crecimiento económico debe ir de la mano con la equidad social y la preservación ambiental. Con solo un 17% de las metas de los ODS en curso de cumplirse para 2030, el pacto urge a las empresas a involucrarse activamente en la sostenibilidad empresarial, comprometiéndose a reducir las emisiones de CO2, avanzar hacia una economía verde y promover una distribución justa de recursos. Este eje también impulsa la inversión en ciencia, tecnología e innovación, así como la creación de alianzas público-privadas para movilizar recursos y conocimientos que apoyen a los países en desarrollo.
Paz y Seguridad Internacional El pacto se enfoca en reforzar la paz y la seguridad internacional, con acciones claras para enfrentar conflictos, promover la diplomacia y crear condiciones para una coexistencia pacífica y estable entre naciones. Este eje también aborda la necesidad de combatir amenazas globales como el terrorismo y los conflictos armados.
Ciencia, Tecnología, Innovación y Cooperación Digital En este ámbito, el pacto busca potenciar el uso de la ciencia, la tecnología y la innovación como herramientas para resolver problemas globales. Se hace especial énfasis en la cooperación digital internacional, estableciendo principios éticos para el desarrollo de tecnologías emergentes, especialmente la inteligencia artificial (IA), y promoviendo marcos globales para la protección de datos y la gobernanza digital.
Juventud y Generaciones Futuras El pacto también incluye una fuerte orientación hacia la juventud, buscando involucrar a las nuevas generaciones en la toma de decisiones globales y garantizar que sus derechos sean protegidos. Se promueve la participación activa de los jóvenes, especialmente en los procesos de gobernanza, y se establecen mecanismos para asegurar su acceso a educación, empleo y salud, fomentando su capacidad para contribuir al desarrollo global.
Transformación de la Gobernanza Mundial Finalmente, el pacto hace un llamado a la reforma de la gobernanza global, abogando por un sistema internacional más justo, representativo e inclusivo. Se plantea la necesidad de reformar el Consejo de Seguridad de la ONU, mejorar la cooperación multilateral y promover alianzas más estrechas entre gobiernos, organizaciones internacionales, el sector privado, la sociedad civil y otros actores clave.
La aprobación del Pacto para el Futuro representa un momento clave en la historia, con un enfoque en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030. Este acuerdo global busca dar respuesta a los problemas más urgentes de la humanidad y del planeta, mediante una hoja de ruta ambiciosa para los próximos años. Con un fuerte énfasis en la sostenibilidad, el pacto refleja la necesidad de tomar decisiones conscientes para construir un futuro más verde, seguro y justo para las generaciones futuras.
El sector privado juega un papel esencial en este pacto, ya que las empresas, tanto grandes como pequeñas, están llamadas a abordar una serie de desafíos globales, desde el cambio climático hasta las brechas digitales. El pacto subraya que las acciones empresariales son fundamentales para impulsar el progreso hacia un desarrollo más sostenible y equitativo
El Pacto para el Futuro incluye varias medidas fundamentales destinadas a mejorar la cooperación mundial en áreas clave como la ciencia, la tecnología y la innovación (CTI), la cooperación digital, la participación de los jóvenes y la gobernanza mundial. Estas iniciativas están diseñadas para abordar las disparidades, mejorar la participación de los grupos marginados y garantizar el desarrollo sostenible a través de sistemas globales más eficaces e inclusivos. Aborda las disparidades mundiales en materia de ciencia, tecnología e innovación comprometiéndose a reducir las barreras al acceso y la participación de las mujeres y las niñas en estos campos, garantizar que el desarrollo y el uso de nuevas tecnologías se ajusten a los derechos humanos y los principios éticos, reforzar la formulación de políticas mediante un mayor uso de la ciencia para abordar los desafíos mundiales, centrándose especialmente en la investigación y la innovación relacionadas con los ODS, e impulsar las capacidades dentro de las Naciones Unidas para aprovechar la CTI para alcanzar los ODS y apoyar a los países en desarrollo.
El Pacto introduce reformas significativas en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, con el objetivo de mejorar su eficacia y representatividad, en particular en lo que respecta a la escasa representación de África.
Reafirma los compromisos mundiales con el desarme nuclear y la prevención del uso de nuevas tecnologías como las armas autónomas y las armas espaciales. Ofrece una hoja de ruta integral para acelerar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y pide que se tomen medidas urgentes en relación con el cambio climático, incluido un compromiso mundial para mantener el aumento de la temperatura por debajo de 1,5 °C y lograr emisiones netas cero para 2050.
Propugna reformas financieras para apoyar a los países en desarrollo, en particular mediante procesos de toma de decisiones más inclusivos en las instituciones financieras internacionales y la movilización de recursos para satisfacer sus necesidades de desarrollo. También incluye medidas para mejorar la forma en que se mide el progreso humano, ampliándose más allá del PIB para incluir el bienestar humano y ambiental.
El Pacto Digital Mundial es una pieza central del Pacto, que establece el primer marco mundial para la cooperación digital y la gobernanza de la inteligencia artificial (IA). Exige la conectividad universal a Internet, la protección de los derechos humanos en línea y la garantía de que la IA beneficie a toda la humanidad. Además, establece directrices para la gobernanza de los datos y compromete a los países a adoptar medidas concretas para 2030.
La Declaración sobre las generaciones futuras introduce medidas para garantizar que las generaciones futuras sean consideradas en los procesos de toma de decisiones mundiales. Incluye la creación de más oportunidades para que los jóvenes participen en la configuración de su futuro a nivel mundial. El Pacto hace hincapié en el empoderamiento de las mujeres, la protección de los derechos humanos y la necesidad de salvaguardar a los defensores de los derechos humanos a nivel mundial. La Cumbre del Futuro, donde se adoptó el Pacto, reunió a más de 4.000 participantes, incluidos líderes mundiales, miembros de la sociedad civil y otras partes interesadas, y marcó la culminación en el año 2024 de un amplio proceso que también incluyó Días de Acción a los que asistieron miles de personas.
El Pacto para el Futuro es un acuerdo transformador que busca dar respuesta a los desafíos globales actuales, poniendo el foco en la sostenibilidad, la paz y la cooperación internacional. Las empresas juegan un rol central en este proceso, no solo como agentes de cambio económico, sino como líderes en la promoción de un futuro más justo y verde. Con una agenda de reformas ambiciosas y un enfoque claro en los ODS, el Pacto para el Futuro establece una base sólida para enfrentar los grandes retos del siglo XXI.